PRIMEROS PASOS EN EL CAMINO DEL "CONOCIMIENTO"

¡Su hijo es un estudiante de primer grado! Ayer aún era un niño pequeño que dependía completamente de usted, pero hoy ha comenzado la escuela, dando los primeros y responsables pasos en su vida. Sí, su hijo ha madurado, pero ahora, como estudiante, necesita mucho de su ayuda y apoyo.

¿Cómo ayudar a su hijo a no sentirse perdido? ¿Cómo darle confianza de que todo saldrá bien? ¿Cómo organizar mejor las actividades de su querido hijo para que el aprendizaje sea una fuente de alegría?

La entrada al primer grado es un momento decisivo en la vida de un niño.

El inicio de la educación escolar es un fuerte estrés para cada niño. Todos los niños, junto con los sentimientos de alegría y entusiasmo por todo lo que sucede en la escuela, experimentan ansiedad, confusión y tensión.

El período de adaptación a la escuela, relacionado con la adaptación a sus principales requisitos, es común en todos los estudiantes de primer grado. Sin embargo, la duración de este período varía. En algunos puede durar entre 2 y 3 semanas, en otros, varios meses, y en algunos casos, hasta medio año, dependiendo de muchos factores: características individuales del niño, la naturaleza de sus relaciones con los demás, el tipo de institución educativa (y, por lo tanto, el nivel de complejidad del programa educativo), y el grado de preparación del niño para la vida escolar.

Un factor igualmente importante es el apoyo de los adultos: madre, padre, abuelos. Cuanto más adultos brinden su ayuda en este proceso, más exitosa será la adaptación del niño a las nuevas condiciones.

¿Cuáles son los signos de una adaptación exitosa?

En primer lugar, es la satisfacción del niño con el proceso de aprendizaje. Le gusta la escuela, no experimenta inseguridad ni miedos.

El segundo signo es cuán fácilmente el niño maneja el programa. Si la escuela es común y el programa tradicional, y el niño tiene dificultades para aprender, es necesario apoyarlo en ese momento difícil, no criticarlo excesivamente por ser lento, y no compararlo con otros niños. ¡Todos los niños son diferentes!

Si el programa es complejo, y además incluye un idioma extranjero, observe cuidadosamente si esta carga es excesiva para el niño. Sería mejor corregirlo a tiempo, de lo contrario, podrían surgir problemas de salud. Tal vez en otra clase, con menos carga, el niño se sienta más cómodo.

Es muy importante al principio infundir confianza en el estudiante, no permitir que se sienta abatido ("¡no lo lograré!"), de lo contrario, la lucha contra la apatía será larga.

Otro signo de adaptación exitosa es el grado de independencia del niño al realizar tareas escolares, su disposición a recurrir a la ayuda de un adulto solo DESPUÉS de intentar hacer la tarea por sí mismo. A menudo, los padres ayudan demasiado al niño, lo que puede tener el efecto contrario. El estudiante se acostumbra a hacer los deberes con la ayuda de los padres y no quiere hacerlo solo. Aquí es mejor establecer de inmediato los límites de su ayuda y reducirlos gradualmente.

Pero, en nuestra opinión, el signo más importante de que un niño se ha adaptado completamente al entorno escolar es su satisfacción con las relaciones interpersonales: con sus compañeros y el maestro.

A menudo, los padres regañan al niño por llegar tarde a casa, por recibir muchas llamadas de amigos "sin razón", o por pasar mucho tiempo afuera. Sin embargo, sería bueno recordar que en este período, el estudiante de primer grado está estableciendo activamente contactos, buscando su lugar en el entorno infantil, aprendiendo a cooperar con otros niños y aceptar ayuda. ¡Ayúdele en este proceso tan difícil! La forma en que su hijo se integre en el reparto de roles sociales afectará todo su período de educación escolar. Recuerde cuán difícil es deshacerse de la etiqueta de "egoísta" o "sabelotodo", y cómo muchos problemas surgen en la adolescencia porque cuando era pequeño, no logró expresarse adecuadamente.

También es necesario hablar sobre las relaciones con el maestro.

La primera maestra es una persona importante en la vida de toda su familia. Sería bueno establecer un contacto cercano con ella desde el principio, escuchar sus consejos, ofrecer ayuda en la organización de celebraciones y actividades comunes: cualquier participación suya en la vida escolar beneficiará a su hijo. ¡Su hijo o hija tendrá motivos para sentirse orgulloso de usted! Asegúrese de estar de acuerdo con los requisitos para que su hijo no se vea afectado por desacuerdos con el maestro. Si no está satisfecho (o no comprende) el método de enseñanza, pida al maestro que le explique sus características y ventajas frente a otros métodos. Creemos que cualquier maestro estará dispuesto a hacerlo, ya que está interesado en verlo a usted principalmente como un aliado, no como un crítico.

El maestro también tiene influencia sobre qué compañero de pupitre "le tocará" a su hijo. Este es un factor importante para una adaptación exitosa del estudiante de primer grado. Asegúrese de preguntar qué relaciones están surgiendo entre los niños que se sientan juntos. ¿Será que su hijo está distrayendo a alguien durante las clases? No se asuste, los niños aún no han dominado las normas de comportamiento y, a esa edad, es bastante difícil permanecer 35 minutos sin distraerse. Trate de hablar con su hijo sobre lo importante que es respetar a los demás cuando están trabajando, es una habilidad valiosa. Asegúrese de felicitarlo si logra pasar esa prueba con éxito. Estimule la ayuda mutua entre los niños, no fomente la actitud de "yo no me meto", quién sabe, tal vez la cooperación y la buena relación entre los compañeros de clase ayuden a su hijo en momentos difíciles.

¡Le deseamos buena salud, equilibrio emocional y éxito, queridos padres! ¡Grandes victorias y logros para sus hijos!

Atentamente, psicopedagoga Sokolova V.G.