El uso del pronombre "they" en inglés para referirse a un individuo no es una práctica reciente; los hablantes de inglés lo han utilizado durante mucho tiempo cuando el género de una persona no se conoce o no es relevante. Aunque "everyone" es técnicamente singular, debido a su significado plural, la gramática tradicional sugeriría que debería acompañarse de un pronombre singular, como "he" o "she". Sin embargo, en el uso cotidiano, "they" ha sido común durante siglos: "Everyone should wear their best clothes" ("Cada uno debería llevar sus mejores ropas"). De la misma manera, cuando no se conoce el género de una persona, se usa "they": "Someone called but they didn’t leave their name" ("Alguien llamó, pero no dejó su nombre").
Lo que es novedoso hoy en día es el uso del pronombre "they" para referirse a individuos específicos y conocidos. La expresión "Everyone has their secrets" ("Cada uno tiene sus secretos") ha sido común, pero lo que ha cambiado es el uso de "their" para referirse a una persona específica: "Jan has their secrets" ("Jan tiene sus secretos"), donde "their" hace referencia a un individuo conocido, Jan. Este uso ha enfrentado cierta resistencia. Los puristas de la lengua argumentan que utilizar "they" tanto para referirse a personas múltiples como a una sola puede resultar confuso. Sin embargo, este tipo de ambigüedad no es exclusiva del inglés; muchos lenguajes tienen palabras polisémicas cuyo significado se aclara por el contexto (por ejemplo, "bank" en inglés puede referirse tanto a una institución financiera como a la orilla de un río). Además, los opositores a este uso argumentan que no es gramaticalmente o biológicamente correcto; no obstante, estos argumentos carecen de fundamento. Los biólogos afirman que existen individuos que presentan características sexuales tanto masculinas como femeninas, y los lingüistas nos recuerdan que lo que se considera gramaticalmente correcto cambia con el tiempo.
Este fenómeno no es exclusivo del inglés. Idiomas como el sueco y el hebreo están experimentando transformaciones similares. El sueco, al igual que el inglés, tiene un sistema de pronombres con género: "han" (él) o "hon" (ella) para individuos, y "den" o "det" para el pronombre neutro. En los últimos 20 años, se ha popularizado el uso de "hen", una palabra tomada del finlandés, que se emplea para referirse a una persona sin especificar su género. Aunque sigue siendo un tema debatido (el Parlamento sueco dictó que no debe usarse en documentos oficiales, aunque los miembros individuales del Parlamento pueden emplearlo), "hen" está ganando terreno, siendo cada vez más común en periódicos, revistas y en la conversación cotidiana.
En hebreo también hay esfuerzos similares para modificar el sistema de pronombres. Como no existen pronombres neutros en hebreo, se utiliza el plural masculino cuando se hace referencia a un grupo mixto. Muchos abogan por un cambio que implique el uso tanto de las formas masculinas como de las femeninas, lo que no es una tarea sencilla. Este cambio implicaría modificaciones no solo en los pronombres, sino también en los adjetivos y verbos, e incluso podría requerir la creación de nuevas letras en el alfabeto hebreo.
El cambio de la morfología de los pronombres no es exclusivo de los idiomas de origen indoeuropeo. En otras lenguas, la morfología puede diferir notablemente. El turco, por ejemplo, al igual que el inglés, utiliza sufijos para indicar pluralidad, pero lo hace con {lar} o {ler}, dependiendo de la vocal en la raíz, en lugar de un simple {s} como en inglés. Así, "mum" (vela) se convierte en "mumlar" en plural, y "ip" (hilo) se convierte en "ipler". Por otro lado, algunos idiomas, como el zapoteco istmo, hablado en México, prefieren usar prefijos, como {ka}, para indicar pluralidad.
Además, en inglés, las preposiciones suelen colocarse antes del sustantivo, como en "in the house" o "to the house". En turco, en cambio, la misma relación se indica mediante sufijos: "ev" (casa), "evde" (en la casa), "evden" (de la casa), "eve" (a la casa). El turco también utiliza la reduplicación para intensificar los adverbios: "iji" significa bien; "iji iji" significa muy bien. Este fenómeno, que no es común en inglés, intensifica el significado de las palabras mediante la repetición. Además, el turco, al igual que el ruso, no tiene artículos definidos o indefinidos, lo que simplifica la construcción gramatical al omitir palabras como "un", "la" o "el".
Por último, las lenguas de señas también presentan una morfología interesante, aunque sus palabras no tienen sonido, están compuestas por los mismos tipos de morfemas que las lenguas habladas: raíces, sufijos, prefijos y morfemas derivados. En las lenguas de señas, los afijos no son combinaciones de sonidos, sino gestos específicos que preceden o siguen un gesto de la raíz, como el movimiento de las manos hacia o desde el firmante.
La morfología de las lenguas, por lo tanto, no es solo un conjunto de reglas gramaticales que regulan la formación de las palabras. Más bien, refleja cómo las culturas perciben y organizan su realidad lingüística y social. A medida que las lenguas evolucionan, la morfología también se adapta para responder a nuevas demandas sociales, como el reconocimiento de identidades de género no binarias, y para reflejar las influencias de otras lenguas y culturas.
¿Cómo se clasifican y producen los sonidos consonánticos y vocálicos en inglés?
En el estudio de los sonidos del habla, la clasificación de los sonidos en dos grandes categorías —consonantes y vocales— puede parecer simple a primera vista, pero encierra una complejidad importante. Para entender la fonética del inglés, es crucial conocer cómo se producen los distintos tipos de sonidos, tanto orales como nasales, y cómo se diferencian entre sí según la manera y el lugar de articulación. A continuación, exploramos estos aspectos de manera detallada.
Las consonantes nasales, representadas por el sonido [ŋ], son una excepción dentro de los sonidos del habla, ya que requieren la liberación de aire a través de la cavidad nasal. En cambio, los sonidos orales, que son los más comunes en las lenguas del mundo, se producen al bloquear el aire en diferentes puntos del tracto vocal. El velum, la parte del paladar blando, juega un papel crucial al elevarse para impedir la salida del aire por la nariz, lo que permite que los sonidos sean orales.
En inglés, además de las tres consonantes nasales, todos los demás sonidos son orales. Estas consonantes orales se dividen en varias categorías, entre ellas los oclusivos (también llamados plosivos), los cuales se producen al bloquear el flujo de aire en el tracto vocal y luego liberarlo repentinamente, creando una especie de "explosión" de sonido. En inglés, encontramos siete sonidos oclusivos:
-
[p] y [b], que son oclusivos bilabiales (el aire se bloquea en los labios).
-
[t] y [d], oclusivos alveolares (el bloqueo ocurre en la cresta alveolar).
-
[k] y [g], oclusivos velares (el bloqueo se da en el velum).
-
[ʔ], un oclusivo glotal (el bloqueo ocurre en la glotis).
Si colocas tu mano frente a tu boca al pronunciar alguno de estos sonidos, especialmente [p] o [b], sentirás la repentina expulsión de aire. Es una característica única de estos sonidos.
Otro tipo de consonantes son las flaps, que se asemejan a los oclusivos pero sin ser exactamente lo mismo. En inglés, solo tenemos un flap, el flap alveolar sonoro [ɾ], que se produce tocando brevemente la punta de la lengua en la cresta alveolar detrás de los dientes frontales, liberando el aire con menor fuerza que en un oclusivo. Este sonido aparece en el habla casual estadounidense en palabras como ladder o pretty.
Las fricativas, en cambio, se producen al obstruir parcialmente el flujo de aire en alguna parte del tracto vocal, permitiendo que el aire pase lentamente a través de una abertura estrecha. Esta obstrucción crea turbulencia, lo que genera el sonido característico de fricción. En inglés, existen nueve fricativas:
-
[f] y [v], fricativas labiodentales.
-
[θ] y [ð], fricativas interdentales.
-
[s] y [z], fricativas alveolares.
-
[ʃ] y [ʒ], fricativas alveopalatales.
-
[h], fricativa glotal.
Una diferencia importante entre las fricativas y los oclusivos es que las fricativas pueden prolongarse en el tiempo. Intenta pronunciar [p] durante un tiempo prolongado, y notarás que no es posible hacerlo, mientras que sonidos como [s] o [v] pueden mantenerse por más tiempo sin dificultad.
Las africadas combinan características de las oclusivas y las fricativas. Se producen al bloquear el aire de forma momentánea y luego liberarlo de forma gradual, similar a una fricativa. En inglés, existen dos africadas:
-
[tʃ], africada alveopalatales sorda.
-
[dʒ], africada alveopalatales sonora.
Las líquidas son sonidos que se producen con una obstrucción mínima del flujo de aire. En inglés, encontramos dos líquidos: [l] y [r], ambos sonoros y alveolares. La diferencia entre estos radica en su articulación: el sonido [l] se produce como una fricativa lateral, donde el aire escapa por los bordes de la lengua, mientras que el [r] retroflejo se articula al levantar la lengua hacia el paladar o al enrollarla hacia atrás.
Finalmente, las deslizadas o glides son sonidos en los que la obstrucción del aire es mínima o inexistente. En inglés, las deslizadas [y] y [w] se producen rápidamente, bien sea acercándose o alejándose de una vocal. Estas deslizadas también se conocen como semivocales debido a su naturaleza transicional entre las vocales y las consonantes.
Por otro lado, los sonidos vocálicos presentan una complejidad diferente. Los sonidos vocálicos se producen con poca o ninguna obstrucción del flujo de aire a través del tracto vocal. Sin embargo, a diferencia de las consonantes, resulta más difícil identificar la posición exacta de la lengua al emitir una vocal. Por ejemplo, al pronunciar las palabras heat y hoot, se puede notar que la lengua cambia de posición y que los labios se redondean de manera diferente en cada caso. Este fenómeno se debe a la altura y el lugar de la lengua, que son los dos parámetros básicos utilizados para clasificar las vocales.
Aunque en inglés hay cinco letras que representan las vocales (a, e, i, o, u), en realidad existen entre 12 y 14 sonidos vocálicos diferentes, dependiendo del dialecto. Por ejemplo, los sonidos vocálicos de las palabras but y put se escriben con la misma letra "u", pero se pronuncian de manera distinta. Además, dentro de un mismo dialecto, la pronunciación de una vocal puede variar de una persona a otra, e incluso más si comparamos distintos acentos regionales, como los del sur de Estados Unidos y los del noroeste del Pacífico.
Por último, las diptongos en inglés son combinaciones de dos vocales dentro de una misma sílaba, donde la lengua se desplaza de una posición a otra. Los tres diptongos más comunes en inglés son:
-
[aw], como en now o lout.
-
[ay], como en buy o tide.
-
[ɔy], como en boy o toil.
Además, es importante entender que la pronunciación de una vocal no es uniforme ni siquiera dentro de un mismo dialecto. Las diferencias pueden ser notorias incluso entre hablantes de una misma región, y mucho más si comparamos entre diversas variedades del inglés en el mundo. Este fenómeno resalta la importancia de considerar las variaciones dialectales al aprender la fonética de un idioma.
¿Cómo el lenguaje afroamericano refleja estructuras gramaticales y fonológicas distintivas?
El uso del tiempo presente singular en el lenguaje afroamericano (AAL) presenta una particularidad que a menudo pasa desapercibida para quienes no están familiarizados con sus reglas gramaticales. En AAL, la presencia del morfema {s} es, en muchos casos, opcional. Por ejemplo, tanto "I always listen to what she say" como "I always listen to what she says" son construcciones aceptables. Esta flexibilidad en el uso del {s} refleja una característica del AAL, que no depende estrictamente de las normas de concordancia verbal impuestas por el inglés estándar (SAE).
El posesivo {s} también se emplea de manera opcional en muchos contextos, especialmente cuando el significado puede inferirse de la disposición de los sustantivos en la oración. Por ejemplo, "The President speech was long and rambling" se entiende perfectamente sin necesidad de agregar el posesivo {s}, ya que el contexto deja claro que se está hablando del discurso del presidente. Esta omisión no afecta la claridad del mensaje.
Uno de los aspectos más distintivos y, a menudo, malinterpretados del AAL es el uso del verbo "be". En lugar de seguir las reglas del SAE, donde el verbo "be" varía según el sujeto (am, is, are), en AAL se utiliza un "be" invariable que no cambia según el tiempo o el sujeto. Este fenómeno se conoce como "invariant be". Se observa también en estructuras comunes en SAE, como después de verbos modales ("They must be quick") o en infinitivos con "to" ("They tried to be quick"). Sin embargo, AAL utiliza el "invariant be" de manera mucho más amplia.
El uso más distintivo de este "be" invariable en AAL es el "habitual invariant be", que denota una acción habitual o recurrente. Por ejemplo, en la frase "She be runnin’ with her team", el "be" invariable indica que la acción de correr con el equipo ocurre de manera regular. Esta estructura no debe confundirse con una descripción de acción en el presente continuo, como en "She runnin’ with her team", donde el uso del "be" se omite completamente para indicar una acción que ocurre en ese momento. Así, estas dos oraciones no son intercambiables, ya que cada una lleva un significado distinto.
El uso de la negación también sigue reglas específicas en AAL. En lugar de usar "ain’t" con el "invariant be", se emplea "don’t". Así, la frase "She don’t be runnin’ with her team everyday" indica que la persona no realiza esa acción regularmente. En contraste, la estructura "She ain’t be runnin’ with her team everyday" no es una construcción gramaticalmente correcta en AAL.
Otro aspecto importante en la gramática del AAL es la llamada "zero copula", es decir, la omisión del verbo "be" en ciertas situaciones. En el inglés estándar, el copula es necesario, como en "She is a student" o "They are tired". Sin embargo, en AAL, estos copulas a menudo son omitidos: "She ready now" o "They tired" son frases perfectamente válidas. No obstante, esta omisión solo se da con las formas "is" y "are"; los verbos "am", "was" y "were" no se eliminan de manera común, especialmente en la formación de oraciones bien estructuradas en AAL.
El "zero copula" sigue reglas adicionales de uso: cuando es posible contraer "is" o "are" en el inglés estándar, en AAL se puede omitir el copula. Por ejemplo, en la frase "I’m not a runner, but she is", el "she is" no puede ser omitido, ya que no es una forma que pueda contraerse en SAE, lo que hace que no sea posible eliminar el copula en AAL. Además, cuando se utiliza en pasado, como "was" o "were", el copula tampoco puede ser omitido.
Otro fenómeno interesante en AAL es el uso del "existential it is" en lugar de "there is/are" en SAE. En AAL, se emplea "it’s" o "i’s" como reducciones de "it is" para expresar la existencia de algo. Por ejemplo, "It’s a problem with his logic" reemplaza "There’s a problem with his logic" en SAE. A diferencia de SAE, donde se distingue entre singular y plural con "there is" o "there are", en AAL "it’s" o "i’s" pueden usarse tanto para sustantivos singulares como plurales, como en "It’s a lot of people here", sin que cambie el significado.
Además de las estructuras gramaticales, el AAL presenta características fonológicas que lo distinguen del inglés estándar. Uno de los procesos fonológicos más comunes es la reducción de los grupos consonánticos, una estrategia articulatoria utilizada para facilitar la pronunciación. Por ejemplo, en AAL, es frecuente la omisión de consonantes al final de las palabras cuando están precedidas por una vocal, como en "help" pronunciado [hɛp] o "cold" pronunciado [kod]. También se eliminan las consonantes [l] y [r] cuando siguen una vocal, lo que lleva a pronunciaciones como "car" [ka] o "ball" [ba].
Otro fenómeno fonológico interesante es la sustitución de los sonidos [θ] o [ð] de SAE por [d], [t], [f] o [v]. Este cambio no es aleatorio, sino que sigue patrones fonéticos específicos. Por ejemplo, en lugar de la pronunciación estándar "think" [θɪŋk], en AAL se puede pronunciar "thinkin’" con una "n" final en lugar de la "ng" velar, lo cual es una característica común de muchos hablantes del inglés estadounidense, no solo en AAL.
El AAL también muestra ciertas particularidades en el uso de vocales y consonantes, lo que crea una sonoridad única que no solo refleja la historia y la cultura de la comunidad afroamericana, sino que también refleja un sistema lingüístico que se ha desarrollado con sus propias reglas y normas.
Endtext
¿Qué revela un hogar más allá de sus muros? La historia detrás de una mansión y sus secretos emocionales
¿Por qué el terrorismo de extrema derecha sigue siendo una amenaza subestimada?
¿Cómo la Arquitectura Orientada a Servicios (SOA) Optimiza los Sistemas en el Internet de las Cosas (IoT)?

Deutsch
Francais
Nederlands
Svenska
Norsk
Dansk
Suomi
Espanol
Italiano
Portugues
Magyar
Polski
Cestina
Русский