La propagación de información errónea en línea no es un fenómeno nuevo, pero los mecanismos actuales que permiten su difusión han modificado profundamente la manera en que consumimos noticias. Un caso ilustrativo es el artículo que comenzó a circular rápidamente en la web, alterado para parecer una fuente confiable, pero cuya falsedad fue confirmada en cuestión de horas por expertos en verificación de hechos. A pesar de su desmentido temprano, el artículo continuó propagándose, evidenciando cómo las noticias falsas pueden mantener su ciclo de vida mucho más allá de su refutación inicial.

El artículo de Harris, inicialmente publicado sin ningún tipo de contexto ni verificación, fue rápidamente desmentido por sitios como Snopes, conocidos por desmentir rumores y engaños en línea. Este sitio trazó la fotografía alterada del artículo hasta su fuente original en un periódico británico y conectó el artículo con otras noticias previamente desmentidas. En cuestión de horas, se había aclarado la falsedad de la información. Sin embargo, el daño ya estaba hecho: a pesar de la desmentida, el artículo continuó siendo compartido y publicado en diversos sitios web y redes sociales. Incluso algunos agregadores de contenido conservadores, como Pamela Geller, republicaron el artículo con comentarios que sugerían que la noticia era parte de una conspiración más grande.

La historia de Harris pasó por un proceso de amplificación en el que los sitios web que agregaban noticias no solo repetían la información, sino que la moldeaban y la distribuían a una audiencia mucho mayor. Algunos sitios lo hicieron sin verificar los hechos, mientras que otros lo presentaron con un lenguaje que dejaba abierta la duda sobre su veracidad. Por ejemplo, en YouTube, varios comentaristas leyeron el artículo completo en voz alta, sugiriendo que había algo más detrás de la historia sin ningún tipo de respaldo verificable.

A pesar de los esfuerzos por desmentir la historia, el daño estaba hecho. El número de vistas del artículo creció de manera exponencial, y la desinformación continuó siendo propagada. Algunos agregadores seguían publicando la historia como si nada hubiera ocurrido, sin hacer mención de los desmentidos, mientras otros simplemente la presentaban como "no corroborada", lo que dejaba a los lectores en un estado de incertidumbre. Este ciclo, en el que una noticia falsa sigue siendo difundida incluso después de ser desmentida, refleja cómo las dinámicas actuales de la información favorecen la circulación de noticias de dudosa veracidad.

Este fenómeno no es aislado. La manera en que las noticias se difunden hoy en día está profundamente influenciada por la naturaleza de los agregadores de contenido. Muchos de los artículos que leemos no provienen de periodistas que investigan y verifican hechos, sino de sitios web que reempaquetan, resumen y distribuyen contenido sin añadir valor real. Este modelo de agregación, aunque no es nuevo, se ha intensificado en la era digital, donde el clic y la compartición rápida son más importantes que la precisión o la profundidad de la información.

Es importante comprender que la producción de noticias ha cambiado radicalmente. Si bien aún existen periodistas dedicados a la investigación, una gran parte de la información que consumimos hoy en día proviene de un proceso de agregación que a menudo no es transparente para los lectores. Este tipo de producción puede comprometer la calidad de la información que recibimos, ya que se prioriza la velocidad y el sensacionalismo sobre la veracidad y la contextualización. Las noticias falsas no son solo un problema de redes sociales; son un reflejo de las deficiencias en la forma en que se produce y distribuye la información en la actualidad.

Al mismo tiempo, este fenómeno pone de relieve una cuestión aún más fundamental: la falta de alfabetización mediática. Los consumidores de noticias, al no ser capaces de distinguir entre información verificada y especulaciones, se ven atrapados en un ciclo de desinformación. Las plataformas digitales han creado un entorno en el que la veracidad de las noticias se diluye, y las narrativas construidas para captar atención se imponen sobre los hechos reales. Esto es un desafío no solo para los periodistas, sino también para la sociedad en general, que debe desarrollar herramientas para navegar por este mar de información con sentido crítico.

El consumo de noticias hoy en día exige una mayor responsabilidad tanto de los productores como de los consumidores. Los usuarios deben ser conscientes de que las noticias no son solo contenidos a consumir pasivamente; también son herramientas que moldean la comprensión del mundo y la toma de decisiones. La desinformación, en este sentido, no solo afecta la política o las elecciones, sino que corroe las bases mismas de la democracia, al crear un entorno donde las personas toman decisiones informadas basadas en hechos que no son ciertos.

¿Cómo la agregación de noticias se transforma en un camino hacia el estatus profesional?

En la actualidad, muchas organizaciones de noticias que operan bajo el modelo de agregación están trabajando activamente en transformar su identidad y reputación para ser reconocidas como competidores válidos dentro del ámbito periodístico tradicional. La agregación de noticias, un proceso que consiste en compilar y distribuir información proveniente de diversas fuentes, no ha sido históricamente vista como una práctica digna de ser considerada un trabajo periodístico de alta calidad. De hecho, gran parte de las plataformas de agregación que surgen con recursos limitados se ven a sí mismas como una etapa intermedia en su evolución hacia el reporte original y la producción de investigaciones propias. Esto se debe a que la agregación ha sido asociada, en muchos casos, con la falta de autoridad o profundidad en comparación con las organizaciones periodísticas que producen reportajes investigativos.

Sin embargo, a pesar de estas percepciones de inferioridad, muchos de los editores y periodistas que participan en estos proyectos han comenzado a luchar activamente contra esta visión negativa, alzando la voz para reclamar el valor de la agregación. Desde un principio, se ha comprendido que el propósito de la agregación no es simplemente una forma de difundir contenido superficial, sino un servicio necesario en un ecosistema de información saturado. Algunas plataformas como Social Post y Circa, aunque nacidas del modelo de agregación, han reconocido que el paso hacia el reporte original y las investigaciones profundas es fundamental para ganar prestigio dentro de la industria.

El caso de VidNews, una organización que ha logrado hacer esta transición con éxito, es ejemplar. A pesar de que inicialmente operaba con un enfoque de agregación, a medida que su organización crecía y obtenía más recursos, sus esfuerzos se orientaron hacia la creación de contenido propio y original, incluyendo la apertura de una oficina en Washington para producir reportajes de mayor profundidad. Esta transformación muestra cómo las plataformas que comienzan con la agregación pueden evolucionar y establecer una identidad propia en el mundo del periodismo profesional, incluso cuando todavía conservan cierto nivel de contenido agregado.

Sin embargo, esta transformación no se limita a las plataformas emergentes. Organizaciones más consolidadas, como The Huffington Post y BuzzFeed, han pasado por un proceso similar, utilizando la agregación como una forma de ganar audiencia, aumentar la visibilidad y fortalecer sus recursos, para luego contratar a reporteros de renombre y cubrir historias de alto perfil. Esta práctica no solo les ha permitido ganar relevancia en el campo, sino que también les ha otorgado una legitimidad profesional, al agregar contenido original y reconocido a su oferta.

Es importante entender que la agregación no debe verse como un trabajo de menor calidad, sino como un punto de partida necesario en el ciclo de vida de una organización de noticias. Los editores de plataformas como Circa y Social Post reconocen que la agregación es, en muchos casos, un recurso valioso que permite a las organizaciones crecer y ganar tracción antes de dar el salto hacia una producción más ambiciosa de contenidos originales. Esta visión también es compartida por muchos en la industria, quienes consideran que, para ser un jugador serio dentro del periodismo, es crucial comenzar con una base sólida, aunque esta provenga de la agregación.

A pesar de la constante presión por parte de los profesionales del periodismo tradicional, que a menudo descalifican la agregación como una práctica secundaria, muchos dentro de este modelo defienden que la agregación es una parte fundamental del proceso periodístico. Argumentan que todos los medios, incluso los más tradicionales, en algún momento dependen de fuentes externas para construir sus informes. De esta forma, se minimiza la distancia profesional entre la agregación y el reportaje original, buscando una mayor equiparación entre ambos tipos de trabajo.

El valor de la agregación radica en su capacidad para organizar, sintetizar y distribuir información de manera efectiva. En un mundo saturado de datos, la habilidad para proporcionar a la audiencia una visión holística, organizada y precisa de los hechos es una competencia vital. Los agregadores también tienen la capacidad de ofrecer un enfoque más amplio que va más allá de la cobertura de un solo artículo, lo que en muchos casos proporciona una perspectiva más completa y matizada sobre un tema determinado.

Por otro lado, una de las características que se deben resaltar en el proceso de evolución de las organizaciones de agregación es el reto de mantener el equilibrio entre el modelo de negocio y la integridad profesional. Las organizaciones deben comprender que para alcanzar el estatus profesional, el paso hacia el reportaje original no es solo un objetivo estratégico, sino una necesidad para asegurar una posición consolidada dentro de la industria. La agregación puede ser una forma de adquirir autoridad, pero es el trabajo original el que consolidará dicha autoridad a largo plazo.

¿Cómo la Agregación de Noticias Reformula la Autoridad Narrativa?

La agregación de noticias ha transformado profundamente la manera en que los relatos periodísticos se estructuran y se presentan al público. Este cambio no se limita únicamente a la forma en que se distribuyen las noticias, sino que también afecta cómo los periodistas, especialmente aquellos en el ámbito de la agregación, se posicionan como figuras de autoridad dentro del proceso informativo. A medida que los agregadores de noticias no generan los relatos originales, sino que los compilan y reestructuran, se enfrentan al desafío constante de diferenciarse de otras fuentes de noticias, a menudo presentando sus versiones dentro de un marco narrativo más amplio que dé sentido y profundidad a los eventos. Esta necesidad de agregar un marco narrativo más amplio nace de la incapacidad de los agregadores para iniciar una historia completa por sí mismos. En este contexto, el objetivo no es simplemente contar lo sucedido, sino interpretarlo y darle coherencia, lo que permite a los agregadores establecer una identidad propia frente a un público saturado de información.

El concepto de "gran narrativa" no es nuevo; sin embargo, en el mundo de la agregación, toma una forma peculiar. Mientras que los periodistas tradicionales pueden recurrir a una estructura jerárquica de importancia de los eventos para dar autoridad a su relato, los agregadores buscan lo contrario. Como no pueden construir un relato desde cero, lo que hacen es redibujar los marcos de interpretación ya existentes. El reto principal radica en cómo encontrar su propio espacio narrativo sin perder la relevancia dentro de una historia ya en marcha. El investigador Jan Boesman y la experta Irene Costera Meijer sostienen que los periodistas narrativos holandeses y belgas han adoptado esta estrategia para distanciarse de los agregadores repetitivos y superficiales. Sin embargo, los propios agregadores también han adoptado enfoques similares para evitar la percepción de que su labor es redundante o trivial. A medida que la forma de contar historias evoluciona, el enfoque de los agregadores se vuelve más sofisticado, intentando darles un sentido más profundo a los eventos que presentan.

Este fenómeno también se vincula con un cambio más amplio dentro del periodismo conocido como el giro interpretativo, que ha transformado la manera en que los periodistas ejercen su autoridad. El giro interpretativo no solo implica relatar los hechos, sino también interpretar el significado de esos hechos. En este proceso, los agregadores, al igual que los periodistas narrativos, se ven obligados a presentar los eventos dentro de un contexto más amplio, lo que les permite asumir el rol de analistas y hacedores de sentido. Es una forma de reclamación de autoridad, ya que, si no pueden ofrecer una cobertura exclusiva o de profundidad, deben compensarlo con un enfoque interpretativo que enriquezca la narrativa.

A nivel micro, la agregación de noticias ha simplificado las estructuras narrativas tradicionales. En lugar de recurrir a la complejidad y a la amplitud de la información, los agregadores optan por condensar las noticias, presentándolas de manera más accesible y directa. Sin embargo, a nivel meso, se observa un patrón similar al de la narrativa tradicional: una ampliación de la visión de las historias, reconociendo que los eventos no ocurren en el vacío, sino que están interconectados dentro de un arco narrativo más grande que justifica su relevancia. Es en este punto donde se empieza a ver una fusión entre las técnicas de los periodistas narrativos y los agregadores: ambos buscan enmarcar los eventos dentro de contextos que den sentido a la información presentada.

Circa, una plataforma agregadora, muestra un enfoque distintivo en este sentido. A diferencia de otros agregadores que simplemente adaptan los relatos de otros medios, Circa transforma las noticias descomponiéndolas en unidades más pequeñas, a las que llama "eventos atómicos". Esta fragmentación permite conectar los eventos entre sí, creando una narrativa más grande y completa. La diferencia clave con otros agregadores radica en cómo Circa trata los eventos: no solo los presenta de manera condensada, sino que construye una narrativa global que vincula diversos eventos a través de un análisis más profundo y estructurado. Para los agregadores, esta capacidad de trazar una narrativa de mayor alcance les permite asumir un rol interpretativo, algo que les otorga una forma de autoridad dentro del campo periodístico.

Sin embargo, a pesar de sus esfuerzos por agregar complejidad a sus relatos, la agregación de noticias sigue siendo un proceso limitado. Está restringido por la necesidad de condensar y simplificar la información, lo que restringe la capacidad de los agregadores para crear nuevos arcos narrativos. En su lugar, se ven obligados a trabajar con los arcos narrativos que ya han sido iniciados por otras fuentes de noticias. A pesar de estas limitaciones, los agregadores de noticias siguen jugando un papel importante al proporcionar un enfoque interpretativo sobre los eventos, lo que les permite afirmar su lugar dentro del periodismo actual. En este sentido, aunque su autoridad sigue siendo frágil y cuestionada, la agregación ha cambiado la manera en que concebimos las noticias, volviendo su universo de información más expansivo y conectado, aunque fragmentado.

Para comprender plenamente este fenómeno, es esencial reconocer que la agregación no solo se trata de simplificar o resumir las noticias. Es una estrategia que busca afirmar la autoridad de quienes la practican en un mundo mediático saturado de información. Al presentar los eventos dentro de marcos narrativos más amplios, los agregadores no solo informan, sino que también interpretan y contextualizan, lo que les permite ser vistos como una voz autorizada, incluso si esa voz no está basada en la originalidad o la profundidad de su propia investigación. El giro interpretativo, en este sentido, se convierte en una herramienta clave para los agregadores que buscan redefinir su posición dentro de un panorama mediático en constante evolución.

¿Cómo se construye la autoridad en la agregación de noticias?

La autoridad de los agregadores de noticias está íntimamente ligada al trabajo de conocimiento que realizan y, por tanto, al desarrollo de su identidad profesional. Si los periodistas deben entenderse como un grupo con una competencia distintiva para informar al público sobre los eventos actuales, es necesario que confíen en la capacidad de sus prácticas laborales para cumplir con esa función. Matt Carlson subraya la importancia del discurso para comunicar y mantener esa autoridad; el trabajo debe ser traducido a través del discurso para que sea reconocido como autoridad por otras partes. El trabajo periodístico no produce autoridad de manera unilateral, como algunos periodistas podrían sugerir cuando abogan por restaurar la confianza del público simplemente con un buen trabajo de reportaje. Sin embargo, el discurso también necesita trabajo detrás de él para respaldar adecuadamente esa autoridad. El discurso periodístico y metaperiodístico que no se fundamenta en un trabajo de conocimiento robusto terminará sintiéndose vacío, como un "pueblo Potemkin" de la práctica periodística.

La naturaleza derivativa del trabajo de conocimiento en la agregación de noticias afecta profundamente a cada una de estas relaciones, minando su autoridad. Daña la identidad profesional de los agregadores, tanto porque no pueden participar en la mitología que rodea al reportaje original como porque su distancia con respecto a las pruebas les deja más inseguros sobre la eficacia de su trabajo. Además, restringe sus prácticas textuales: pueden elegir apegarse a las mismas formas narrativas que las fuentes en las que basan su trabajo, pero si lo hacen, aumentan la falta de originalidad de sus relatos y ofrecen pocas razones para ser considerados como definitivos. Esta sensación de inferioridad en torno a la agregación también dificulta la traducción de sus prácticas textuales de manera que signifiquen autoridad. El trabajo real de agregación está en gran medida ausente de los relatos que produce: es poco probable que uno lea una frase como: “A través del examen de docenas de tuits y resultados de Google News, y una comparación detallada de varias cuentas de medios, Social Post ha aprendido...” en un artículo agregado.

Una de las principales formas en que los agregadores representan su trabajo mediante prácticas textuales es el uso de hipervínculos, que pueden reflejar las convenciones de citación del trabajo periodístico tradicional e indicar el trabajo que han hecho los agregadores al buscar y comparar fuentes de noticias. Así, el hipervínculo opera como un importante conducto textual para la autoridad del trabajo de agregación, aunque está limitado en ese sentido en comparación con las citas o las indicaciones textuales de observación directa, debido a su ambigüedad y su relación indirecta con el trabajo detrás de él.

La cualidad secundaria de la agregación también ha influido en gran medida en un discurso metaperiodístico negativo, que ha sido el trasfondo de su percepción de inferioridad profesional. Todos estos factores combinados han otorgado al trabajo de conocimiento dentro de la agregación un papel central en la erosión de la autoridad de los agregadores en este estudio. El trabajo de conocimiento probablemente juega un papel más destacado en la influencia de la autoridad periodística en este caso que en otras áreas del periodismo, pero es un factor que podría ser relevante en muchas de esas áreas: verificación de hechos, reportajes de investigación, blogs en vivo y transmisiones en vivo, crítica de los medios, y el uso que los periodistas hacen de las redes sociales para recopilar y difundir información, por mencionar solo algunos.

Es crucial añadir dos preguntas al analizar la autoridad de varias formas de periodismo: ¿Cuáles son los procesos a través de los cuales se produce y valida el conocimiento dentro de este fenómeno? ¿Cómo refuerzan o socavan estos procesos la autoridad periodística, particularmente en relación con los otros componentes de la autoridad?

El caso de la agregación puede proporcionar orientación para comprender otras formas de trabajo de conocimiento derivado en relación con la autoridad y el estatus profesional. Cuando las prácticas de producción de conocimiento son inherentemente derivativas, la relación funcional entre los componentes de la autoridad se desajusta. El estatus profesional se ve gravemente reducido, ya que aquellos que participan en las prácticas originales que se imitan utilizan el discurso público para marcar a los intrusos como fuera de los límites de la profesión, o al menos en sus márgenes. Los productores de conocimientos "imitados", como otros intrusos, se enfrentan entonces a varias opciones respecto a esta degradación profesional: pueden rechazar la profesión por completo y construir una identidad basada en su falta de conformidad profesional, pueden construir estructuras y valores profesionales alternativos (el ecosistema mediático conservador exhibe características de este enfoque), o pueden luchar por un pequeño estatus profesional dentro del campo del que están tomando prestado el trabajo. Este último enfoque es el que los agregadores en este estudio tomaron. Sin embargo, según este estudio, las rutas tradicionales para acumular estatus profesional, construidas a partir de una identidad como miembros de una comunidad respetada de profesionales, parecen ser en gran parte inaccesibles para los productores de conocimiento derivado.

La autoridad de la agregación, aunque debilitada por la ruptura del trabajo de conocimiento y el estatus profesional, no está completamente descartada. Otros productores de conocimientos imitativos encuentran maneras de reforzar su propia autoridad que, en última instancia, son destructivas en lugar de aditivas. Los teóricos de la conspiración y muchos en los medios conservadores y populistas dedican gran parte de su energía a derribar la autoridad de las fuentes de información más establecidas para establecer su propia autoridad en oposición a ellas. Los editores de revistas académicas depredadoras y de noticias falsas, en su lugar, se aprovechan de la autoridad de las formas que imitan, confiando en el engaño para permitir que la autoridad se transfiera a ellos. Sin embargo, los agregadores en este estudio luchan por obtener autoridad mediante muchas de las mismas estrategias que otros periodistas más cercanos al centro de la profesión, de una manera que no disminuye la autoridad de esos periodistas, sino que simplemente intenta hacer espacio bajo su sombra.

No es difícil ver las semillas que algunos de los agregadores que examiné han sembrado para el crecimiento de su propia autoridad. Estos agregadores han basado sus prácticas en estratos tan similares a los del reportaje que los dos son frecuentemente difíciles de distinguir. Se preocupan profundamente por producir noticias precisas, atractivas y útiles, y están ansiosos por comunicar esos objetivos a otros. Están socializados, formal e informalmente, en los valores profesionales del periodismo, y buscan cumplir con los mismos estándares éticos que el resto de su profesión. Y en gran parte, lo hacen. Estos agregadores desean profundamente ser aceptados por otros periodistas como iguales profesionales y ser valorados por sus audiencias, y quieren lograr ambas cosas haciendo un trabajo excelente. Han adaptado las técnicas de recopilación de noticias a un torrente de información en línea de formas novedosas, y han modificado las formas narrativas tradicionales con la esperanza de distinguirse y ayudar a las audiencias a comprender esa avalancha informativa. Incluso en medio de las inestables bases epistémicas y profesionales de la agregación, todavía existe una vía para que la autoridad se construya mediante un trabajo de conocimiento viable y una identidad profesional significativa.

Finalmente, la agregación se vuelve más propicia para construir autoridad cuando su trabajo se vuelve más epistemológicamente viable. Esto se observa en casos donde la agregación incorpora elementos que tradicionalmente han sido dominio exclusivo del reportaje, como entrevistas que van más allá de una simple llamada telefónica confirmatoria y un uso más extenso de documentos para corroborar y verificar relatos. Los agregadores también se han acercado a esto...